lunes, 22 de julio de 2013

El balar de su verso en mi poema

Un poema con nombre y apellido,
con mucho calor,
con versos de lana entretejido.

Un poema al que robé el alma, pero con una esencia insondable,
con mucho de todo,
con nada descifrable.

Un poema diferente a otros,
una balada, un dibujo de asombro,
con mucho de risas y dulzor estoico.

Un poema tierno y silente,
con altura para irrumpir en mi voluntad de bien,
con diáfanos cristales que apuntan desde el cielo a los pies.


Una obra que me da versos,
con palabras que deslumbran en ellos,
un poema que me deja sin palabras,
una rima que le da sentido a los versos y los emplaza.

viernes, 12 de julio de 2013

Y Sócrates decide escupir

Es el año 2237, y en la tiranía de las democracias, un audaz equipo de arqueólogos e historiadores deciden buscar los antecedentes de la democracias de hoy, y cómo llegaron a transformarse en lo que son, una dictadura de las coaliciones políticas y de la “Élite política”, la cual también vive en un sector del pueblo donde el voto posee más valor, pues un principio de esta nueva “democracia” nos dice que (cómo hay más pobres que ricos), el voto de los ricos vale en porcentaje lo mismo que el voto de 100 personas de escasos recursos, eso incluye a los quintiles que ha impuesto el gobierno de turno; quintiles que viven con el sueldo mínimo y que no reciben beneficios por poseer la cantidad de dinero que determinó el estado “es suficiente”, por ello este viaje en búsqueda de respuestas. Se ha descubierto en las ruinas de Atenas, la celda donde murió posiblemente Sócrates, y entre las excavaciones algo espectacular, un manuscrito y un dibujo que se le atribuyen al afamado filósofo.  Después de un análisis y de un trabajo que demoró años se descubrió lo siguiente: En el último momento, presumiblemente Sócrates decidió escupir la cicuta, el por qué, fue relatado en un breve escrito que dejó en piedra, el cual fue descubierto por este equipo de excavación, el que igual logró recuperar un dibujo en piedra, cercano a estas escrituras.


Mi acusados tuvieron más humanidad,su frialdad fue calor al lado de esta ceniza,ni mi sabiduría pudo llevarme más lejos,la verdad tiene un sabor amargo y  mis manos frías tienen miedo,tampoco mi amor a la ley pudo salvarme de mi conciencia,¿es acaso lo saludable un veneno? Es mejor el sabor de la tierra.Vengo del infierno y me mostré valiente, los dioses lo saben,y morí por ellos, aun cuando no creía en ninguno, mi orgullo fue Cronos y mi amor,Zeus,salté tan lejos como me permitió mi sabiduría, y creía que volabay hoy decido escupir la cicuta, no es real, ya no creo en la verdad,no comprendo su falsa modestia, el oráculo se auto-gobierna,decido escapar de esta jaula para buscarte otra vez,espero que cuando te encuentre no me juzgues por ser pordiosero y no un rey,me iré mintiendo para que vengas enojada a buscarme,espero cambiar tanto que no reconozcas mi nuevo caracter,aun así espero abrazarte fuerte pero hoy me quebraste y mira, me ves caer
sonriente, feliz y 
afable.  ¿Existe una mentira más grande? – la verdad y mi semblante


El descubrimiento más grande vino después, lo que se escribió no fue hecho por Sócrates, uno de sus discípulos tomó su lugar decidiendo morir por él, Sócrates así hizo gala de su mejor arte; “la mentira”. Su secta continuó viviendo del arte del engaño, sustituyendo a diferentes ciudadanos a la hora de las votaciones y cambiando así las decisiones de la polis, pues la secta trabajaba para los enemigos de turno (los que pagaran mejor). La secta secreta liderada por Sócrates continuó viviendo en la opulencia y en un grupo reducido, se hicieron llamar los animales políticos, para ello fundaron un círculo cerrado, el cual interactuó durante la historia en diferente sucesos históricos que aun se están estudiando, y presumiblemente hasta el día de hoy, lo que si se sabe es que perduró hasta el día de su extraña confesión en la piedra, luego todo se derrumbó. (escribo esto desde la oscuridad de mi pieza, pues he descubierto que lo que hicieron los animales políticos fue solo cambiar su nombre).
En mi cabeza resuena el terrible destino que tiene el decir la verdad.


Pd: Referente al dibujo, no todo se puede escribir, hay cosas que no deben escribirse

jueves, 11 de julio de 2013

Un asesino

Hoy cometí un crimen…
debo confesarlo abiertamente, y no me siento culpable,
hoy tomé un cuchillo y fragüé un plan para callarle,
lo he logrado y el sentimiento fue excitante,
he visto en sus ojos la agonía de cuando el aire abandona el mundano traje.
Qué momento más sublime, su carne entumecida por mi presencia,
mi cuchillo en mis manos atravesaron toda su existencia,
y me sentí Dios – o  casi – más fui un hombre por completo,
y ante mí caían de rodillas agonizando, ustedes, seres incompletos.
Aquella sensación de poder, aun me hace tiritar y exhalar rápidamente,
me alcé victorioso y mi victima a mis pies se retorcía – eso fue impagable.
Lo peor de todo, fue tener que despedirme de mi amigo,
le dije: Adiós fuiste un mal compañero, un consejero por el “quizás” pervertido,
y en ese momento de su cuerpo saltó barboteando sangre, y su cara era la de mis miedos.
(y me sentí nacer con un nuevo semblante).

miércoles, 10 de julio de 2013

El veneno de la planta tiempo

En su nombre se esconde la más común de las alucinaciones,
de sus raíces crece un terrible veneno que no logra tocar sus labios, tampoco su cielo,
pero el miedo, la traición del suelo, entumecen su nombre,
entumecen su fuego, y poco a poco se duerme.
No !!, no lo hagas, no te dejes apagar, con la luz que prendiste he de iluminar.

Y  salté a anotar en mi cuaderno, rápido como un rayo;
cosas de colores al caldero fue lo que vi, también hojas de cuaderno,
pinturas interpretativas y también uno que otro gato negro,
habían esperanzas, no eran muchas, pero le daban un sabor diferente.
Si !! dije entre dientes, y no pude sino anotarlo, y fragüé un plan para crearlo.

Emulando nombres, alucinando peces voladores,
de sus cielos salen raíces que caen como fuegos de mil colores,
no hay miedo como otros días, ahora hay suspenso,
me voy despertando, debo tener más fuerza para alzar el vuelo.
Quizás !! dije al ver el veneno; Ya dí el paso, ahora me queda empinar el codo pues me queda poco tiempo.


domingo, 7 de julio de 2013

Smile

Y se dibuja temerosa bajo su nariz y sobre su mentón,
temerosa sale a relucir su collar de perlas,
también curvas que me recuerdan su pasado,
y ella se esconde sobre la nariz y bajo la hermosa pareja.

Escondida sale a relucir y mirar tímidamente con su traje de corteza,
Temerosa otra vez y esperando que la encuentren, escapas pequeña.
Sales a cantar de vez en cuando pues si que eres una niña inquieta,
y cuando lo haces te escapas otra vez y solo puedo observar tu bellísima silueta.


Ella corre el visillo de las pestañas y va a espiar siempre alegre,
alcánzame, alcánzate, ¿cansado? (esto está recién comenzando).
Te dibujas con un lápiz tenue, y aun así no te borras de su semblante,
aquel lápiz es sutil pero ha dejado, sin embargo, una marca imborrable.


miércoles, 3 de julio de 2013

El arte del idiota


Es sutil y violenta, dice todo con la boca cerrada,
es arte escrita y gritada a los cuatro vientos,
es un secreto a voces que murmuran en el silencio.

Es una expresión que no dice nada con sonidos,
aun así hace vibrar cada fibra y tiene un enorme sentido,
aun cuando al parecer no se notara, está sintiendo que el mundo se cae en su espalda.

El arte del idiota es sincera, tímida y algo peligrosa,
pues si se descubre deja al artista hablando con su propia sombra,
de hecho cae de rodillas ante sus oscuras ausencias -colores dicen algunos - y sus mejillas enrojecidas cuentan la anécdota.

La sutil omisión del artista es fabrica de trajes del sonriente embelesado,
el idiota escapa y no puede pensar bien, va hacia atrás mirando,
cae con su cara hacia el cielo y vestido de bufón alguien grita :"bravo" - la función ha dado comienzo.

En una tela blanca luchan ausencias y colores extraños,
el artista y el idiota intentan dibujar algo que no exprese o diga tanto,
pero el arte del idiota es ingenua, y tal vez sea la característica que lo delate frente a la magna obra que él observa.

El idiota es artista, pero el artista no es idiota,
la diferencia radica en apenas una cosa.
Se es idiota en su arte y se es artista haciendo idioteces.
Terrible paradoja en ella, espectacular juego de matices, sombras y lentejuelas.

Como un artista del renacimiento, la miré a los ojos,
en apariencia no vi más que dos lindos luceros,
pero hilando más fino y adentrándome en la sensibilidad de ese momento,
sentí en aquel eterno instante como se transfiguraba de un botón inquietante e interesante,
a una espectacular flor que ante mí deslumbraba con su color exuberante.

Fue un momento, fue un instante, aparente, eterno, profundo, expectante, imaginario, una situación alucinante. Cuando nos dimos cuenta estábamos en un cuento en la casa de un hombre pequeño, y por la ventana podíamos ver el otro mundo "el real" dirían los hombres necios, pero eso no importaba, yo seguía perdido en la fantasía, y la taza se enfriaba, bueno eso diría el idiota, y el artista... sonreía.